Una Nueva Década 1940
Mientras el mundo entero veía con horror la escalada bélica de la Segunda Guerra Mundial, en México se sentían aires de cambio.
El país se beneficiaba de la inmigración de ciudadanos españoles que huían de su guerra civil recibiendo un importante aporte en las ciencias, las artes y los negocios.
México entraría en una época de crecimeinto sin precedentes y el el futbol, se venían más cambios.
Ya se contaba con la participación de grandes figuras del futbol español quienes se quedaron en México durante las giras del Barcelona y la Selección Vasca, pero los dirigentes deseaban expandir la competencia.
¿Aires de Cambio?
La Liga Mayor tenía muy claro que el torneo con equipos de la Ciudad de México comenzaba a ser aburrida para los aficionados.
Había que vigorizar el torneo y encontrar cómo expandir la competencia.
Algunos de los equipos participantes como Atlante, presentaba serios problemas económicos y sus dirigentes pensaban seriamente en desaparecer al equipo, cosa que alarmó a los demás poarticipantes.
Antes de pensar en nuevos competidores era necesario conservar los existentes.
Había que encontrar al hombre adecuado para salvar al Atlante. En poco tiempo encontrarían la solución.
Ese hombre sería el entonces Teniente Coronel Núñez quien no solo le daría nuevos bríos al Atlante sino que ayudaría, con ideas frescas, a levantar la liga.
Con esta incorporación, Atlante se fortalecía como nunca y comenzaría a tener un papel importante no solo en lo deportivo sino también en la organización del futbol en México.
La Visión de la Liga Mayor
Al llegar el señor Núñez a la Liga Mayor de inmediato se notó su presencia aportando ideas innovadoras.
Conocedor como pocos de la infraestructura de los transportes en su época como militar, propuso que se invitaran al menos dos equipos de provincia, específicamente de los estados de Veracruz y Jalisco.
Gracias a la infraetructura ferroviaria, estos estados eran de fácil acceso desde la capital.
Los directivos del Real Club España de inmediato apoyaron la idea y colaborarían para actualizar el futbol mexicano.
Había que aprovechar el fenómero de migración a la Ciudad de México de muchas personas de esos Estados de la República quienes ante la visita de los suyos, sin duda llenarían los parques de futbol.
Así se lanzaron las invitaciones y dos equipos aceptaron el reto: Moctezuma de Orizaba y Selección Jalisco de Guadalajara.
Moctezuma de Orizaba
El equipo orizabeño era patrocinado por la cervecería del mismo nombre.
Era un equipo muy interesante dentro de la liga regional de Veracruz, contando con jóvenes talentos de la región aunque sus dirigentes entendían que había que reforzar al equipo para poder competir con decoro.
La aceptación de la invitación de la Liga Mayor representó algunas discuciones en la liga local pero finalmente hubo la visión a futuro de que más equipos serían invitados en un futuro si el experimento tenía éxito.
El futbol veracruzano estaba listo para la nueva aventura.
Selección Jalisco
En la Ciudad de Guadalajara resultó más sencilla la decisión.
La Liga de Occidente ya contaba con una selección que jugaba regularmente, por lo que, pensando en representar dignamente al futbol de Jalisco, se decidió presentar a la flamante Selección Jalisco a la competencia.
Este equipo estaba formado por los jugadores más destacados de el Guadalajara, Oro, Atlas, Nacional y otros equipos participantes de la liga.
Al igual que en el caso de Veracruz, la afición tapatía se frotaba las manos ante la posibilidad de ver a los grandes equipos de la capital en partidos de competencia.
La selección Jalisco estaba en pié de guerra y resultaría un enorme atractivo para la Liga Mayor.
Con estas incorporaciones comenzaba una nueva década 1940 en el futbol mexicano.
Los Equipos de la Ciudad de México
Los equipos de la Ciudad de México se prepraban para el siguiente torneo con diferentes estrategias.
Tanto Marte como Necaxa decidieron renovar sus plantillas incorporando jugadores jóvenes pensando a futuro.
Marte trspasaba a Ballesteros, brillante medio centro al Moctezuma al igual que a Honorio Artega, punta izquierda.
Necaxa se desprendía de demasiados jugadores en favor de Atlante que armaba un verdadero trabuco.
Raúl Estrada, Lorenzo Camarena, Gustavo Ortega e Ignacio Avila, entre otros, pasaban a las filas azulgrana causando sensación entre los aficionados atlantistas y pavor entre los necaxistas que veían como su equipo se debilitaba.
Asturias y España prefirieron conservar su base de jugadores esperando la incorporación de alguno de los jugadores españoles que habían partido a sudamérica procedentes del Barcelona y de la Selección Vasca.
Se percibía en el ambiente del futbol mexicano una efervecencia poco común ytodo parecía indicar que una nueva década llena de éxitos y emociones comenzaría pronto.
Una triste Noticia
Por aquellos días en que todo era optimismo y alegría, el futbol mexicano enfrentaba una dura noticia: Juan “Trompo” Carreño fallecía.
El símbolo de Atlante encontraba una sorpresiva muerte en el momento en que se esperaba que brillara como nunca rodeado de tantas estrellas que había contratado su equipo.
Comenzaron los rumores alrededor de su fallecimiento. Unos decían que las malas artes de una mujer lo habían llevado a la tumba.
Poco después se dijo que una peritonitis no atendida terminaría con su vida.
A partir de ese momento comenzaría la leyenda de uno de los mejores jugadores que el futbol haya tenido en su historia.
La figura de Juan “Trompo” Carreño perduraría hasta nuestros días.
Así arrancaba una nueva década 1940.
La Historia del Futbol en México Continúa